Una mujer que había llegado de Hong Kong, murió por la aplicación de unas inyecciones para agrandar sus caderas en una clínica estética del centro de Pereira. Cristina Osorio Restrepo, de 27 años, tuvo que ser atendida de urgencia en la clínica Risaralda al presentar complicaciones respiratorias luego de la aplicación de la sustancia por parte de un hombre que se identificó como médico y sus dos ayudantes, pero los esfuerzos de los galenos por revivirla fueron inútiles, falleció pocos minutos después de su ingreso.
La señora Osorio había llegado al país para asistir el sepelio de su esposo, quien fue asesinado a comienzos de diciembre y ahora, un niño de 8 años hijo de la pareja, ha quedado sólo y en un país extraño, indicó la abuela del menor. Luz Elena Restrepo tía de Cristina Osorio Restrepo la mujer que murió, denunció que las dos mujeres que participaron en el procedimiento huyeron asustadas tan pronto ella empezó a presentar los problemas respiratorios que finalmente derivaron en su deceso. "Se montaron en un taxi y salieron corriendo" dijo la dama, quien exigió a los responsables del centro de estética que permence cerrado desde entonces, dar la cara y a las autoridades de salud intervenir para que este lamentable desenlace no se vuelva a repetir en otras personas incautas que confían su vida a profesionales y establecimientos que no cuentan con la capacidad o el conocimiento para realizar este tipo de tratamientos . La señora Restrepo calificó a su sobrina como un ángel que mientras estuvo en el mundo luchó porque los suyos tuvieran mejores condiciones de vida por lo que viajó a Hong Kong a trabajar arduamente durante los últimos años y lamentó que en medio de este drama un niño de 8 años hijo de Cristina quedara sólo en el mundo, porque su padre había sido asesinado al comenzar el mes de diciembre.
fuente: Caracol radio
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